Abstract
Una vez producido el Brexit, otras cuestiones empiezan a acaparar la atención de las instituciones europeas. En este estudio se hará referencia a dos de los principales desafíos a los que se enfrenta la coordinación europea en el año 2022 desde el punto de vista de la ley aplicable a la relación de afiliación: 1) la proliferación del trabajo en varios Estados miembros frente a los desplazamientos temporales de trabajadores; 2) la posible consolidación del teletrabajo como nueva forma de prestación transnacional de servicios. Ambos desafíos son consecuencia de los cambios en el paradigma de la movilidad tradicional en el trabajo. Sin embargo, solo el primero ha sido abordado por el TJUE y la propuesta de reforma de las normas de coordinación, siendo el teletrabajo el gran olvidado… por ahora.
Once Brexit is already done, European institutions are drawing attention to other issues. This study will refer to two of the main challenges that European coordination faces in 2022 from the point of view of the law applicable to the insurance obligation: 1) the increase in the number of cases of pursuit of activities in several Member States versus posting of workers; 2) the potential consolidation of telework as a new form of transnational provision of services. Both challenges result from the latest paradigm shift in labour mobility. However, only the first one has been addressed by the CJEU and the revision proposal of the coordination rules, while telework has been forgotten… until now.