Abstract
Reconocer los derechos humanos de las personas con discapacidades en virtud de la Convención es asegurar el goce pleno de reconocerle igualdad y libertades fundamentales, que en el campo laboral deben verse reflejadas. La prohibición de discriminación ha tenido respecto a las condiciones de las personas discapacitadas gran envergadura en los últimos años, para una correcta aplicación en la legislación de los Estados. Pero, no solo basta su adecuación normativa, sino también en el campo de trabajo tiene que verse reflejada en el mismo sentido. A lo que España ha ido refiriendo como una necesaria reforma en el mercado laboral, pero debido a cuestiones extrajurídicas dicha aplicabilidad no ha sido posible. Las dificultades económicas han sido algunas de ellas.